Que lustre el de este negro zapato ,recién embetunado, reluciente y perfectamente cerrado como todo mocasín, sin necesidad de cordones, sin debilidades, sin precisión de ayudas extras....Y dos manzanas completamente fuera de este contexto, con su piel tersa, irisada, con su natural aspecto, como contemplando esa otra compañera que el zapato ofrece orgullosamente en un plano más elevado. Está tan alejado un lustrado mocasín de unas manzanas sencillas como lo está el político del ciudadano. El político se muestra impecable, asertivo y seguro. El ciudadano contempla el discurso, desde su espontaneidad, el político muestra una ventaja, juega con un futuro prometedor: una manzana por encima de las otras, un futuro a conseguir. La idea puede llegarnos o no, pero la fuerza y belleza de las imágenes ahí está. Las manzanas se nos ofrecen con una intensa riqueza de matices en su piel. Veo decenas de colores y destellos en cada una de ellas, parece que nuestro autor buscó las más especiales para retratarlas y sin embargo se muestran naturales, reales, auténticas. Y el contraste, tan bien realizado, tan bien plasmado, muestra una obra impactante y bella. Antonia Sánchez
1 comentario:
Que lustre el de este negro zapato ,recién embetunado, reluciente y perfectamente cerrado como todo mocasín, sin necesidad de cordones, sin debilidades, sin precisión de ayudas extras....Y dos manzanas completamente fuera de este contexto, con su piel tersa, irisada, con su natural aspecto, como contemplando esa otra compañera que el zapato ofrece orgullosamente en un plano más elevado. Está tan alejado un lustrado mocasín de unas manzanas sencillas como lo está el político del ciudadano. El político se muestra impecable, asertivo y seguro. El ciudadano contempla el discurso, desde su espontaneidad, el político muestra una ventaja, juega con un futuro prometedor: una manzana por encima de las otras, un futuro a conseguir.
La idea puede llegarnos o no, pero la fuerza y belleza de las imágenes ahí está.
Las manzanas se nos ofrecen con una intensa riqueza de matices en su piel. Veo decenas de colores y destellos en cada una de ellas, parece que nuestro autor buscó las más especiales para retratarlas y sin embargo se muestran naturales, reales, auténticas. Y el contraste, tan bien realizado, tan bien plasmado, muestra una obra impactante y bella.
Antonia Sánchez
Publicar un comentario